CEGUERA VOLUNTARIA
Hoy, meses despues de abrir este blog, y
otros pocos mas despues de escribir nuestra primera entrada, me siento en la
necesidad de volver a retomarlo; no se cómo ni por qué, pero algo me llamaba a
hacerlo.
Y si, el título de esta entrada es ceguera
voluntaria, os preguntaréis por qué, si evidentemente a nadie le gustaría vivir
bajo la ceguera. Pues bien, no me refiero exactamente a ceguera en cuanto a
visión, la cual también puede ser voluntaria, y eso lo aprendí este año en las
clases de diversity; pero el caso, hay veces que somos tan necios que no vemos
más allá de los problemas que tenemos, que nos obcecamos en vivir bajo ese
sufrimiento temporal ocasionado por diversos problemas que pueden tener toda la
seriedad del mundo, pero ¿sabéis qué?, eso no nos sirve de NADA; suena a
tópico, y de hecho no soy yo la más apropiada para decirlo, pero
afortunadamente, soy consciente de ello, porque tengo un grupo de amigas y
personas importantes de aqui y de alla que se encargan de recordarmelo.
Pero hoy, especialmente hoy, hablo de una
de ellas, de la misma que ha decidido atrincherarse por un periodo de tiempo
indefinido, y no se si será porque no sé cuando la veré de nuevo, pero la estoy
hechando de menos como si llevara años sin verla.
A ti, a esa persona que me manda videos
frikis de gente friki que hace cosas peores que nosotras, para desestresarme
antes de un examen final, a la que aunque no lo diga con palabras lo expresa
todo con lo que hace, a la que esta dispuesta a todo, a alegrarte cuando lo
necesitas, o llorar contigo si hace falta; ella, la que te deja mensajes
ocultos en sitios ocultos que te hacen llorar cuando los ves, la que con un
"¿qué importa el resto, yo te amo igual?" consigue sacarte una
sonrisa en medio de un llanto incomprensible; a esa persona en especial,
gracias, gracias por todo, por todo eso y por un infinito número de cosas que
no he mencionado pero que tu y yo somos conscientes de ellas.
Mucho ánimo a pesar de no poder respirar,
oler ni saborear, te esperamos donde siempre, a la hora de siempre.